Si ella te gusta y quieres que la cosa vaya a más, vas a tener que trabajártelo, amigo. La primera impresión cuenta, pero lo que viene después es aún más importante.
Piensa que una relación personal es como un torneo de golf. Cada swing es decisivo. La preparación es importante. El momento de contacto con la pelota es crucial. No obstante, la clave de tu éxito está en un detalle que muchas veces se pasa por alto: el seguimiento. Es cuestión de paciencia y compromiso, dos palabras que no son muy habituales en nuestro vocabulario, pero que en esta ocasión pueden darnos la clave del éxito. Independientemente de las circunstancias (ya sea la primera cita, la primera noche en tu casa o el momento en que te presenta a sus padres), no bastará con que juegues bien en el momento preciso. Deberás tener en cuenta cómo ella percibe cada uno de tus pasos, para poderte avanzar en tu siguiente movimiento.
Diferencias entre hombres y mujeres
Piensa que una relación personal es como un torneo de golf. Cada swing es decisivo. La preparación es importante. El momento de contacto con la pelota es crucial. No obstante, la clave de tu éxito está en un detalle que muchas veces se pasa por alto: el seguimiento. Es cuestión de paciencia y compromiso, dos palabras que no son muy habituales en nuestro vocabulario, pero que en esta ocasión pueden darnos la clave del éxito. Independientemente de las circunstancias (ya sea la primera cita, la primera noche en tu casa o el momento en que te presenta a sus padres), no bastará con que juegues bien en el momento preciso. Deberás tener en cuenta cómo ella percibe cada uno de tus pasos, para poderte avanzar en tu siguiente movimiento.
Diferencias entre hombres y mujeres
"Vosotros los hombres entendéis las relaciones como una serie de etapas que se tienen que ir superando, como si se tratara de una escalera y uno tuviera que ir subiendo los peldaños. Necesitáis situaros: ¿soy un amigo? ¿soy un rollo? ¿soy una posible pareja?", comenta Francisca Molero, directora del Instituto de Sexología de Barcelona.
En cambio, las mujeres no suelen tener la necesidad de ir alcanzando objetivos. "Ellas son mucho más conscientes de su capacidad de seducción y no se fijan metas. Pero para sentirse a gusto, deben notar que son las ?elegidas?, que se han convertido en el centro de atención de él, al menos cuando están a su lado", asegura Molero.
Esto lleva a malos entendidos. En ocasiones, a ti te basta con alcanzar un logro: la primera cita, el primer beso, la primera vez que te acuestas con ella... Si has llegado ahí, es porque significa algo, ¿no? Pues parece que para ella, no. Puede haberte besado porque en ese momento le apetecía, pero si no refuerzas la intimidad creada en ese momento, de poco te va a servir.
Vuestra primera cita
En cambio, las mujeres no suelen tener la necesidad de ir alcanzando objetivos. "Ellas son mucho más conscientes de su capacidad de seducción y no se fijan metas. Pero para sentirse a gusto, deben notar que son las ?elegidas?, que se han convertido en el centro de atención de él, al menos cuando están a su lado", asegura Molero.
Esto lleva a malos entendidos. En ocasiones, a ti te basta con alcanzar un logro: la primera cita, el primer beso, la primera vez que te acuestas con ella... Si has llegado ahí, es porque significa algo, ¿no? Pues parece que para ella, no. Puede haberte besado porque en ese momento le apetecía, pero si no refuerzas la intimidad creada en ese momento, de poco te va a servir.
Vuestra primera cita
Habéis pasado una noche fantástica juntos y ahora quieres demostrarle que te gusta de verdad. Vale, pero no te excedas. No corras a agregarla como amiga en Facebook. "Ser empalagoso o agobiante en las primeras etapas es muy negativo", señala Molero.
Siguiente paso: las cosas han ido bien, pero aún no es el momento de cantar victoria. "No puedes dar por hecho que volveréis a quedar. Aún no sabes lo que está buscando ella y no puedes presuponer que es lo mismo que tú quieres. Lo mejor es esperar un par de días para llamar y volver a negociar una nueva cita", explica la sexóloga asturiana Carolina Lombardía.
Siguiente paso: "Lo mejor en estos casos es enviar un SMS o un e-mail diciendo que te gustaría seguir conociéndola", aconseja Molero. Así abres una puerta sin dar nada por sentado.
El primer beso
Siguiente paso: las cosas han ido bien, pero aún no es el momento de cantar victoria. "No puedes dar por hecho que volveréis a quedar. Aún no sabes lo que está buscando ella y no puedes presuponer que es lo mismo que tú quieres. Lo mejor es esperar un par de días para llamar y volver a negociar una nueva cita", explica la sexóloga asturiana Carolina Lombardía.
Siguiente paso: "Lo mejor en estos casos es enviar un SMS o un e-mail diciendo que te gustaría seguir conociéndola", aconseja Molero. Así abres una puerta sin dar nada por sentado.
El primer beso
Es un punto básico en la relación, es una forma automática de pasar de la "zona amigo" a la "zona ligue". Todo lo que ocurra antes del beso, por muy especial que sea, puede ser interpretado como amistad. Sin embargo, una vez has dado el beso, está claro que los dos estáis abiertos a algo más. "Al añadirle un componente erótico a la amistad, se puede plantear una relación", aclara Molero. El beso no sirve para dar nada como seguro, pero te allana el camino que os puede o no llevar a otro estadio.
¿Y cómo llevarlo a cabo? Por muy tópico que suene, sigue imponiéndose el beso en la puerta de casa, a modo de despedida. "Nunca pasa de moda: crea expectativas e ilusión y, además, te vas a dormir con una sonrisa", explica la sexóloga.
Siguiente paso: no creas que al día siguiente puedes darle un morreo a modo de saludo. Sí que puedes tener una actitud más cercana, como tocarle la cintura cuando la saludes o permitirte pequeñas libertades. Tendrán que venir más besos, para no moverte de la zona que has conquistado, pero no debe descubrir la ansiedad que sientes porque eso ocurra.
La primera vez que os acostáis
Lo más difícil es decidir cuándo. "Existe la idea de que para demostrar que eres desinhibido tienes que hacerlo en la primera cita. Pero si ella te gusta en serio, ambos os sentiréis más seguros si vais más despacio. Lo que ocurre es que el miedo de defraudar al otro y la falta de confianza para poner el tema encima de la mesa provoca que a veces las primeras relaciones sexuales no sean satisfactorias", explica Molero.
Carolina Lombardía también aconseja que se espere un poco. "Alargar el cortejo hace ganar seguridad y evita arrepentimientos", explica. Según esta especialista, antes de saltar a la cama, deberíamos haber tenido unas cuantas citas. La clave no está tanto en el número, sino en la variedad. "De noche todos parecemos más atractivos, pero también está bien conocer a la otra persona en un plan que suponga compartir una afición: ir al cine, pasear, ver una exposición...", recomienda Lombardía.
Siguiente paso: si has seguido los consejos anteriores, la situación es bastante fácil. Ya has construido algo a lo que volver, una relación que se basa en veros de vez en cuando y hacer cosas que os apetecen. Así que no se darán situaciones violentas porque tienes un entorno en el que los os sentís cómodos. Y eso es algo que debes respetar. Seguramente, cada vez os entrarán más ganas de pasar más tiempo sin salir de la habitación. Pero si de buenas a primeras, ella ve que tras la relación sexual, ya no tienes ningún interés en hacer otro plan, seguramente se sentirá molesta. Y, otra cosa, un sms diciendo lo mucho que te ha gustado siempre es bien recibido.
Un regalo sorpresa por su parte
Carolina Lombardía también aconseja que se espere un poco. "Alargar el cortejo hace ganar seguridad y evita arrepentimientos", explica. Según esta especialista, antes de saltar a la cama, deberíamos haber tenido unas cuantas citas. La clave no está tanto en el número, sino en la variedad. "De noche todos parecemos más atractivos, pero también está bien conocer a la otra persona en un plan que suponga compartir una afición: ir al cine, pasear, ver una exposición...", recomienda Lombardía.
Siguiente paso: si has seguido los consejos anteriores, la situación es bastante fácil. Ya has construido algo a lo que volver, una relación que se basa en veros de vez en cuando y hacer cosas que os apetecen. Así que no se darán situaciones violentas porque tienes un entorno en el que los os sentís cómodos. Y eso es algo que debes respetar. Seguramente, cada vez os entrarán más ganas de pasar más tiempo sin salir de la habitación. Pero si de buenas a primeras, ella ve que tras la relación sexual, ya no tienes ningún interés en hacer otro plan, seguramente se sentirá molesta. Y, otra cosa, un sms diciendo lo mucho que te ha gustado siempre es bien recibido.
Un regalo sorpresa por su parte
Todo el mundo sabe decir: "Gracias? ¿Cómo sabías que me gustaba?". Si quieres ir más allá, reconoce el esfuerzo que ella ha puesto en el mero acto de regalarte algo, independientemente de cuál sea el obsequio. Si se trata de una etapa inicial de la relación, pensar en un regalo para ti puede haberle provocado nervios y mareos durante tres días. E incluso si lleváis varios años juntos, si te limitas a darle las gracias y seguir con lo que estabas haciendo, la dejarás hecha polvo. "De todas formas, si no te gusta, deberás decírselo, valorando en todo momento que te haya hecho un regalo. El problema es que si te callas, creas un precedente muy peligroso. Ella se va a seguir haciéndote regalos de ese palo y tarde o temprano, se convertirán en una arma arrojadiza. Al principio de la relación, con mucho tacto, tenemos que ir educándonos en los gustos del otro", recomienda Lombardía.
Siguiente paso: dile por qué es importante para ti su regalo y pregúntale qué la llevó a escogerlo para ti.
El día en que te presenta a sus padres
Si sus padres comparten el pan contigo, es porque te aceptan como progenitor de sus nietos. A pesar de semejante perspectiva, deberías controlar mucho lo que dices. "Es importante no hablar demasiado, porque acabarías contando cosas que no deben saber. Es importante guardar las reglas de cortesía, que te permitirán no ser ni demasiado familiar ni excesivamente servil, que son lo dos defectos más comunes en este tipo de situación", considera Lombardía. También deberías evitar los comentarios acerca de su hija o las frases en futuro sobre ella. Te arriesgas a que te acusen de creer que la conoces mejor que ellos o a que ella se mosquee porque estás revelando una parte de su personalidad que no le gusta que ellos conozcan.
Siguiente paso: justo después de la cena, dile a tu novia: "Son muy divertidos. Me ha encantado conocerlos." Ella marcará el ritmo de vuestros siguientes encuentros y bastará con ver tu buena predisposición para que se quede tranquila. Habéis superado otra prueba.
Tus peores meteduras de pata
Volvéis a casa en coche después de salir a cenar con unos amigos tuyos y tu novia empieza a mosquearse. Cada vez está más cabreada. ¿Es que no la has incluido en la conversación lo suficiente? ¿O es que el tema no le interesaba en absoluto? Tú eres quien debe interpretar su estado de ánimo y tomar aire para estar seguro antes de enfrentarte al problema con un abierto y benigno: "¿Quieres que hablemos?". Si te pregunta por qué lo dices, dile que parece preocupada y que, si algo va mal, te gustaría solucionarlo.
Siguiente paso: una vez que te haya comunicado el motivo de su malestar, reconoce que te has equivocado de manera rápida y contundente; así dejará de hacerte boicot. A las mujeres les encanta que los hombres reconozcan que han hecho algo mal, siempre que no lo comenten con sorna. Dile que te gustaría solucionarlo. Más adelante puedes matizar lo que sea, porque también tendrás que alegar tus razones. Pero con esa primera entrada, ella estará más dispuesta a escuchar tus argumentos.
Siguiente paso: una vez que te haya comunicado el motivo de su malestar, reconoce que te has equivocado de manera rápida y contundente; así dejará de hacerte boicot. A las mujeres les encanta que los hombres reconozcan que han hecho algo mal, siempre que no lo comenten con sorna. Dile que te gustaría solucionarlo. Más adelante puedes matizar lo que sea, porque también tendrás que alegar tus razones. Pero con esa primera entrada, ella estará más dispuesta a escuchar tus argumentos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario